Hablando de Cocos

*Historia verídica, de un domingo en la noche en una heladería de un centro comercial al sur de la ciudad*

Estaba el Catito acurrucado en su casa, con la camiseta de la selección aun puesta, con cerveza en la nuca de esa que te lanzan en la Víctor por pura alegría, hasta que vino un mensaje del más allá, y mi antena del más acá lo captó:

“quiero helado”

Después de matar al chanchito para el antojo nocturno, me fui a la heladería. El antojo no andaba exigente, solo quería helado, no dijo de cual. Llegué a la heladería.

Catito: Buenas Noches, tiene helado casero?
Vendedora 1: Claro!, tenemos de mora y coco
C: deme 2 de coco
V1: preparen 2 como yo!!
C: o_O
V1: O_o
C: ya dice!!! Jajajajajajajaja
V1: como que ya dice si yo soy coco
C: buuuueeeeeeeeeeeeee… yo respondo por mí no más jajajajajajajaja
Vendedora 2: y dice que es coco?
C: aja! La muy osada
V1: jajajajajaja
C: ella se refiere hace mucho, mucho mucho tiempo atrás… cuando era coco
V2: jajajajajajajajajaja la muy coco
C: jajajajajajajajaja
V1: aquí están sus cocos
C: o_O su coco no me simpatiza, no esta como me lo ofreció, ud. Dijo que me lo iba a dar completo y mire
V1 y V2: biiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii jajajajajajajajajaj
C: le falto la cereza!! Se le comió la cereza!!!!!
V1: ahí están y con jalea para que le sepa mejor ><
C: para la otra no diga que el coco viene completo y rico, Usted es fulera.
V2: lo anda ofertando el coco
C: para la otra no ofrezca incompleto el coco
V1 y V2: cha que nos cayó bien, venga otra vez para seguir con los cocos
C, V1 y V2: juajuajuajuajua

Moraleja: gracias a Dios, no hubo de guineo… si no… jajajajajajajaja